El caso Cesc Fábregas sigue sin completarse y su fichaje por más difícil que parezca se tendrá que cerrar la primera semana de Julio. El futbolista de gran calidad tiene decidido presionar a Wenger que es quien tiene la llave y ya le ha llamado a pesar de estar en puras vacaciones que le darán todavía un dolor y un quebradero de cabeza.
Ahora en Indonesia sigue pensando en el FC Barcelona y es que el fichaje de Cesc Fábregas no es cuestión de dinero sino de tiempo y mucha calma. Los aficionados culés tienen claro que a pesar de la espera se mueren en muchos de los casos en verlo de azulgrana y tienen tiempo como para pensar que es uno de los que vestirá de azul y grana.
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