"Me dijo que dirigir al Real Madrid, con tanta figura, no era fácil. Estando de jugador con Boca había muchos nombres, y era muy difícil para el técnico ese manejo diario. Cuando en un equipo hay mucha figura se necesita simpleza, tener la palabra justa para llegar al jugador y que acepte. Se respeta a Zidane por su trayectoria, no solo en el Madrid, sino en el fútbol mundial. Había chances pero muchas cosas no salieron para que terminara fichando por el Madrid, también en el 99 hubo una opción de la Lazio muy fuerte y Boca no quiso, después yo me terminé rompiendo los ligamentos de la rodilla. Quizás el fútbol siempre quiso que mi destino fuese Boca. El mercado de invierno en España es muy corto y se seleccionan a los mejores, es muy difícil. De todas formas, ahora ha cambiado mucho y sólo los grandes de las mejores ligas pueden fichar jugadores con nombre".
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