Sergio Sánchez, aún defensa del Espanyol, habla del mal malaguista en la Cadena Ser. También de una posible vuelta a la Costa del Sol: "Málaga es mi casa, donde he disfrutado muchísimo y es donde he competido en la máxima competición. Mi mujer es de allí y mi hija es de allí, me siento muy identificado con Málaga. Sigo perteneciendo al Rubin, pero vamos a intentar buscar una solución y poder desvincularme. Yo quiero jugar y el sentimiento está por encima de la categoría. El tema de la categoría es secundario. No he hablado con Mario Husillos, he tenido siempre buena relación con él, siempre va a mirar lo mejor para el club, el beneficio total del club. Al Málaga hay que quererlo, pero entran muchos factores. Tenemos que valorar muchos factores. Lo que yo siento por el Málaga es de manera mutua".
Señala al catarí: "El Málaga ha tenido un año difícil. El club debe ser de Málaga otra vez y no de gente que no da la altura y se tiene que centrar en recuperarse a sí mismo. El Málaga debe de volver a ser lo que siempre ha sido. Es muy triste el descenso. Tengo muchas amistades en Málaga. Espanyol y Málaga son mis dos equipos, es duro, estoy dolido y decepcionado. El equipo y la afición no merecen esto. Pero cuando internamente hay tanto desorden, es inevitable que pase factura. Quiero que el Málaga se centre y lo dejen crecer y volver. El desorden empieza por el propietario. Al-Thani ha dado mucho al club y a la ciudad, pero en las malas hay que saber estar y quizás esperamos más de él".
Quiere jugar: "Ha sido un año difícil, diferente, aprendiendo. Estamos esperando a que termine la temporada y cuando todo se normalice, veremos a ver que opciones hay. Tengo ganas de partido. La relación con el anterior técnico ha sido dura. Ahora quiero que pase y el año próximo empezar a tope. Tengo ganas de ver a compañeros, ver las dos camisetas. Va a ser un partido que voy a estar a gusto juegue o no".
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