
Sensación del partido: "La sensación, tras la primera parte, es buena. Esta categoría es compleja y me voy algo insatisfecho con la falta de contundencia y precisión ofensiva en el primer tiempo, pero ajustamos en el descanso, mantuvimos la calma y el orden, y salimos como un equipo que no se rinde. Sabemos que hay cosas que mejorar, pero el ADN del equipo es luchar y no bajar los brazos".
Rotaciones muy positivas: "Todos los cambios han sido buenos, Castel, por ejemplo, ha salido al campo y ha anotado un gol decisivo. Al final, este proceso es una evaluación continua; estamos haciendo cambios estratégicos y es crucial para posicionarnos, analizar el estado de forma de cada jugador y garantizar que todos estén activos y listos para competir".
La esencia: "Sabemos que en esta categoría es fundamental sumar de tres en tres, pero el cómo y el porqué de las cosas se ha reflejado en los dos últimos partidos contra grandes clubes, donde el equipo ha dado la cara. Es esencial recordar de dónde venimos y estar preparados para lo que se avecina; en este caso, nos enfrentamos al Oviedo. Debemos mantener los pies en la tierra y actuar con equilibrio".
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