

El Málaga no intentará cerrar el fichaje de Ricky Álvarez y irá a por un mejor mediocampista de banda que será Cazorla o bien el otro que suena que es Pastore, un mediapunta de clase mundial que cuesta más de 35 millones de euros. Ni Villarreal ni tampoco el Palermo le quieren vender a ninguno de los dos porque son fijos en su actual club.
En AS comentan que la posibilidad de su fichaje se enfría y se sopesan varios nombre de gran calidad que juegan en la Liga Española y en la Liga de Italia. El argentino costaría en torno a los 10 millones de euros, cantidad que no se pagará por este crack que al final se puede hacer un buen jugador.
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