
"Terminando el entrenamiento me dieron la noticia. Es una felicidad enorme que se reflejó en el camarín: mis compañeros me compraron una tortita. Estoy agradecido del cariño de ellos hacia mí. Llegar allá y hacerlo como llegué aquí. Tranquilo y con ganas de pelear el puesto. Voy para allá a llegar a trabajar y tratar de consolidarme lo antes posible. Desde que llegué en general el club me recibió muy bien. Lo que sí, en un principio pensé que con la gente iba a ser un poquito más difícil, pero gracias a Dios el cariño de la gente fue desde el primer día que llegué. A través de las redes sociales y aquí en San Carlos. Estoy muy contento de haber podido jugar por Católica, en la cancha me sentí muy en casa. Me pasó en algunos partidos que con el canto de la hinchada me sentía en casa, estoy muy feliz por eso", dijo Erick Pulgar, nuevo delantero del Bologna italiano.
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