
"No tenía dinero, y el futuro no pintaba bien, pero amaba demasiado este juego. No era bueno técnicamente, y me odiaba a mí mismo por ello. Siempre soñé con ser entrenador. Si alguien hubiera venido y me hubiera dicho, con 25 años, que dejara el fútbol para ser manager, no hubiera tenido ningún problema", ha dicho Klopp como era como futbolista. Sobre el ritmo frenético de partidos ha dicho: "Son demasiados partidos y no hay pausa. Y eso no es bueno para lograr éxitos con la selección".
No hay comentarios