Muñiz, entrenador del Málaga, habla de intranquilidad en los minutos finales de los partidos disputados en los cuáles se ha perdido bastante. El asturiano dijo tras el 1-1 ante el Almería: "El partido estaba muy igualado, tuvimos ocasiones para hacer el 2-0 y no se produjo. Nos está costando mantener serenidad y la tranquilidad para superar esos minutos finales, nos entra un poco de pánico, nerviosismo y temor a que nos empaten. Cuando no marcas el segundo se te complica un poco el tema. Teníamos tarjetas amarillas y ellos hacían buenas transiciones, queríamos coger una contra y solucionar el partido antes de esos minutos finales. Nos entra cierta intranquilidad y eso al final te genera problemas".
Así lo analiza: "Jugamos con la tranquilidad necesaria y como creemos que tenemos que hacerlo. El equipo va bien clasificado, con una buena suma de puntos. A veces no somos conscientes de la dificultad, o pensamos que jugamos solos. Cuando se gana parece que es normal y cuando se pierde que es una catástrofe. Por un empate no nos vamos a tirar de los pelos ni nos vamos a rasgar las vestiduras. Sabemos que hay que seguir mejorando. Los más exigentes con nuestro trabajo somos nosotros".
Mensaje a la afición: "Poco se les puede decir. Cada uno decide y se va como estima oportuno. Nosotros intentamos hacer nuestro trabajo de la mejor manera posible. Unas veces ganas y otras no, eso es fútbol y pasa en todos los sitios, no sólo aquí. Y más en esta categoría tan igualada. Tenemos que hacer el mejor partido posible, marcar los máximos goles posibles... Pero no es fácil, una cosa es hablar y otra hacer. Del empate te fastidia que te marquen en los últimos minutos y pierdas dos puntos, podíamos haber solucionado el partido antes".
Los cambios: "Los cambios van muy condicionados al resultado. Hay que valorar todas las situaciones. Hay que tener tranquilidad, paciencia, ser conscientes de todo lo que puedo ocurrir en un partido y saber superarlo. El que salga en los últimos minutos tiene que hacer lo máximo para ayudar al equipo y a sus compañeros, aprovecharse de la hora de trabajo que habían hecho los suyos. Esto es fútbol hay que convivir con el acierto y el error. Luego valoramos los cambios como buenos si ganas o malos si empatas o pierdes".
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