
“Con la muerte de Cruyff perdemos una figura a la que ya no podremos ir a ver cuando lo necesitemos, al que no tendremos cerca en momentos de duda. En cambio, nos queda la suerte de haberlo disfrutado a todos, nos ha dejado muchas cosas a todos, cada uno a nuestro nivel y eso sólo es posible cuando alguien te da algo. Ante un juego tan indescifrable como este, nos dio las herramientas como para dominarlo, cosa que es imposible a no ser que te llames Messi. Yo era un jugador con talento para jugar, pero no entendía para nada este juego. Nos abrío un mundo fascinante, una película que interiorizamos. Ayer hablaba con mis hijos que no conocieron a Cruyff tratando de explicarles lo que era y sólo se me ocurrió compararlo a ese profesor de cualquier materia que te gusta. Ese maestro ante el que solo esperas ir a su clase porque que te ayuda a querer esa asignatura. Era un tipo que te decía todo lo contrario que habías escuchado toda la vida. Siempre te decían que perdías porque no corrías y llega él un día y te dice que pierdes porque corres demasiado”, ha confesado Pep Guardiola, discípulo de Johan Cruyff.
No hay comentarios