
El papel de La Rosaleda: “La afición sabe cuándo tiene que apretar al equipo. Los jugadores nos tenemos que aislar de eso y no tener miedo con balón. En casa nos está costando un poco más y jugamos más con el corazón que con la cabeza. Tenemos que jugar sin miedo a tener el balón. Yo prefiero jugar delante de más de 22.000 personas que en un campo vacío”.
Rival: “Sabemos que vamos a enfrentarnos a un buen equipo. No han empezado bien, pero han cambiado de entrenador. Conozco a Pablo Alfaro, ha ido a un gran club y nos va a poner las cosas difíciles, pero nosotros tenemos que jugar con nuestra identidad. Los rivales también juegan y te hacen daño, pero tenemos que mostrar nuestras fortalezas y saber lo que tenemos que hacer en cada momento”.
No hay comentarios