
Quique Setién, entrenador de Las Palmas, se mostró convencido de que la destitución no le vendrá nada bien, aunque no tuvo miedo al hablar de ello: "Me centro en trabajar y en preparar los partidos que tenemos por delante porque lo otro no lo puedo controlar. Si el club decide tomar una decisión la aceptaré sin más, no voy a perder la vida. Intento hacerlo lo mejor que sé y que puedo, por lo que espero encontrar trabajo el año que viene. Acepto las críticas como el primero y me considero gran responsable de que el equipo no gane. Siempre he aceptado la crítica constructiva".
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