
Un contrato que ni leyó: "¿Qué pasa? Que a Kepa se lo llevan. A mí me repercute en que vivimos una situación de: tienes que firmar esto para poder jugar, si no, te vas a ir a la grada. Claro, después de saber que no contaban conmigo, que me obligaban a firmar un contrato que no había leído ni yo ni mis representantes, con el entrenador delante... Yo dije: Yo no quiero aguantar esto. Yo no sé lo que voy a firmar. Tengo 22 años... Soy un niño, pero tonto no soy. Yo quiero ver lo que es esto, yo esto no lo voy a firmar. ¿Qué pasó? Que, eso, o lo firmaba, o no lo podía volver a ver. Así que pensé: Yo me voy a casa, hablo con mi familia... Yo tengo que hablar de esto. Desde ahí, hasta final de año, ni una conversación. Nunca dije nada malo, me llevaba bien con todos mis compañeros. Cuando acabó la temporada valoramos todos los puntos y yo dije: Donosti".
No hay comentarios