Pide calma: "Tenemos que ser nosotros mismos. Van a pasar muchas cosas. El estado de ánimo es muy importante. Es el momento de ser crítico, pero construir. Estamos en el punto de competir pero con una presión añadida. Por eso quiero tranmitir calma. Nuestro trabajo es ser pesimista en la victoria y optimista en la victoria. Nos toca ir a contracorriente. Los chicos están muy cansados, porque lo han dado todo. Espantar todo lo malo que está viniendo ahora. Ser más eficaces en las dos área. Los actores importantes son los jugadores. Contra el Eldense, la gente cantaba villancicos y tenemos que volver a engancharlos".
Se siente preocupado: "Me preocupa que hemos tenido casi cuatro ocasiones bajo la línea y no han sido goles. Ocasiones muy claras de llegar dentro del área. Es cierto que ellos nos han generado más peligro en el balón parado y en las segunda jugadas. Hay que seguir trabajando en eso, porque es un debe que nos lleva lastrando la segunda vuelta. Debemos tener clama y ser autocríticos, pero para construir y no para destruir porque en un club grande puede pasar eso. Tenemos dos salidas fuera y a pensar ya en ganar ante el Eibar. Hemos generado cuatro ocasiones claras. Hemos tenido la salida con los laterales altas y Kevin y Larrubia se metían por dentro. No puedes dominar todo en el partido. Las acciones de peligro de ellos vienen todas igual y el resto son de desgaste. Si con cuatro claras no nos da, pues habrá que generar diez".
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